TÉCNICAS ESPIRITUALES

Comparto en esta entrada un estudio de J. B. Bennett sobre técnicas espirituales sufíes que enseñaban los khwajagân, las mismas tienen estrecha relación con las prácticas de auto-observación y auto-recordación utilizadas en el trabajo pragmático del Cuarto Camino.
 


1.- Hosh dar dam. Sé consciente de cada instante. No dejes que se asombre tu atención por la duración de un solo suspiro. Tente a ti mismo presente siempre y en todas las situaciones.

Hosh dar dam se puede traducir como "respira conscientemente". La palabra persa "hosh" casi es la misma que la griega nepsis, en latín sobrietas, usada ocho siglos antes por los Maestros del desierto de Siria, y que aparece muy frecuentemente en la Philokalia, una obra que Ouspensky atribuía a los Maestros de la Sabiduría. Este último consideraba este término como el equivalente del término de Gurdjieff, "autorecordar". Como era usada por el Khwajagan siempre estaba relacionada con la respiración. De acuerdo con su enseñanza, el aire que respiramos nos provee con alimento para el segundo cuerpo o cuerpo del espíritu, llamado por Gurdjieff el cuerpo kesdjan de las dos palabras persas que significan la "nave del espíritu". Los Maestros de la Sabiduría siempre han poseído el secreto de la respiración. La longevidad de los antiguos Maestros se atribuye en especial al zikr  (repetición de los nombres de Dios, o palabras de alabanza y agradecimiento) con control respiratorio.

Hosh dar dam, la respiración consciente, fue considerada como la técnica básica de autodesarrollo.

El Rashahat dice que el significado de hosh dar dam es que la respiración es la nutrición del hombre interior. Conforme respiramos, debemos poner nuestra atención en cada respiración sucesiva y estar conscientes de nuestra propia presencia. Para esto, es necesario estar en el estado correcto, porque si la respiración se efectúa con desatención, no irá al lugar correcto. Mawlana Saad ad-din Kahghari explica que la hosh dar dam requiere que de una respiración a otra mantengamos nuestra atención abierta a nuestra meta. La desatención es lo que nos separa de Dios. Además dijo que en el camino de los Maestros, se le concede una gran importancia al aprendizaje sobre cómo retener la respiración, porque al retener la respiración, nuestra atención se agudiza y entra en nosotros más profundamente. Khwaj a Baha ad-din Naqshbandi dijo: "En este sendero, los cimientos están construidos sobre la respiración. Mientras más capaz sea uno de estar consciente de su propia respiración, más fuerte será la vida interior de uno". Agregó que es importante, de manera particular, mantener la conciencia del cambio de la inspiración a la expiración.

Estas instrucciones para el control respiratorio están adicionadas con una explicación detallada de la manera en que el zikr se lleva a cabo. Esto fue añadido por escritores posteriores, para el beneficio de los miembros del grupo de derviches Naqshbandi. Mientras que los antiguos Maestros consideraron la hosh dar dam como la técnica básica para la nutrición de los cuerpos interiores del hombre, Maestros externos al Khwajagan como Najm ad-din Kubra, le dieron un significado más místico; éste último la relacionó con la sílaba Hu, que es el nombre universal de Dios, pronunciado consciente o inconscientemente con cada respiración, desde el momento en que nacemos hasta que morimos.

Mawlana Jami, el gran poeta del Asia Central, dijo que hosh dar dam es el momento absoluto cuando la identidad personal se fusiona con el Único. Éste, dijo, es el secreto máximo de la respiración. Ghayb-i huwiyyat es un término técnico usado por el Khwajagan para dar a entender la aniquilación de uno mismo y la unión con el ser absoluto, que está en la meta final de la liberación.

2.-  Nazar bar qadam. Mantén tu atención delante de ti a cada paso que das. Desea la Libertad y no lo olvides nunca.

Nazar bar qadam se puede Interpretar como: ¡Cuida tus pasos! Qadam significa pie o paso y también suerte o fortuna. Se deriva de la raíz q-d-m que expresa fuente u origen. El aforismo se puede interpretar con el significado: "Recuerda de dónde vienes y adónde vas. Mantén tu atención en el paso que vayas a dar en este momento". Este aforismo es la base de un ejercicio espiritual importante usado por los derviches, que remonta su tradición a los Maestros de la Sabiduría.

3.- Safar dar watan. Viajas hacia tu Hogar. Recuerda que estás viajando desde el mundo de las apariencias hacia el Mundo de la Realidad

Safar dar watan es: “La jornada a casa”. Esto se interpreta como la transformación que saca al hombre del mundo del potencial desconocido, alam-i arvah, al mundo de la voluntad, alam- i wujub, donde el hombre se vuelve consciente de su destino y se le da el poder de realizarlo. El alam-i wujub corresponde al Reino del Cielo en los Evangelios. El Khwajagan enseña que el hombre no puede conocer ni darse cuenta de su propio destino, en tanto permanezca en el estado subjetivo del sueño, khayalat.

4.- Khalwat dar anjuman. Soledad entre la multitud. En todas tus actividades exteriores mantente internamente libre. Aprende a no identificarte a ti mismo con ninguna otra cosa.

Khalwat dar anjuman, soledad en la multitud, es quizás el aforismo más citado de las expresiones de los Maestros. Hay muchos comentarios y explicaciones. En su expresión más simple, es lo que Gurdjieff llama "sin identificación": ser capaz de entrar por completo en la vida del mundo exterior sin perder su propia libertad interior. Cuando se le preguntó por una expresión abreviada del método del Khwajagan, Baha
ad-din Naqshbandi respondió: "Khalwat dar anjuman, es decir, externamente estar con la gente e internamente estar con Dios". Khwaj a Awliya dijo que esto significa: "estar tan profundamente ocupado con su propio zikr que uno puede caminar a través del mercado y no estar consciente de un sonido".

5.- Yad kard. Recuerda a tu Amigo: Dios. Que la plegaria de tu boca sea la plegaria de tu corazón.

Yad kard significa: Remembranza. La explicación dada en el Rashahat es que uno debe aprender a mantener el contacto entre la lengua y el corazón, en especial en el zikr, lo que sentimos es lo que debemos decir y lo que decimos es lo que debemos sentir. Además el Rashahat da instrucciones muy detalladas para estar consciente de los sentimientos al mismo tiempo que se está hablando.

6. Baz gasht. Regresa a Dios. Que sea tu único propósito conseguir la Realidad.

Baz gasht  es retorno, viaje en un sólo sentido; tener un solo propósito. Ubaidallah ahrar interpretó este aforismo queriendo significar que tenemos dentro de nosotros la meta de nuestro esfuerzo. Las semillas de la transformación son sembradas en nosotros desde arriba y tenemos que atesorarlas por encima de todas las posesiones. Donde sólo hay un árbol que da frutos, todo lo demás es hierba mala y debe ser removido.

7.- Nigah dasht. Resiste a los pensamientos extraños. Mantén tu atención en lo que estás haciendo, sea exterior o interior.

Nigah dasht significa: Alerta. Sé consciente de lo que atrapa tu atención. Aprende a alejar tu atención de los objetos indeseables. Esto se interpreta como "sé vigilante en pensamiento y recuérdate a ti mismo", khawatir muraqaba. Pienso que nigah dasht es lo mismo que el "autorecordar" de Gurdjieff.

8.- Yad dasht. Sé siempre consciente de la Presencia Divina. Acostúmbrate a sentir la Presencia de Dios en tu corazón.

Recolección. Esto se explica como la última etapa antes de que la transformación se complete. El buscador se vuelve consciente que su pérdida de "sí mismo" será compensada por el amor objetivo, hubb-i zati. La humillación que conduce a esta etapa cesa de alcanzar al buscador porque descubre ante él la alegría ilimitada que le traerá la Verdad.

De acuerdo al Rashahat, Kwaja Baja ad-din Naqshbandi introdujo tres términos técnicos más:

9.- Wuquf-i zaman. Conciencia del tiempo. Mantener un registro de los estados temporales de uno.

Distinguir la presencia, huzur, de la ausencia, ghaflat. Khwaja Naqshbandi describió esto como "autoposesión" o "estar consciente". Agregó el importante consejo de que uno debe siempre recordar estar agradecido cuando regresa al estado de "presencia".

10.- Wuquf- i adadi. Conciencia de número.

Khwaja Alá ad-din Attar dijo: "El número de veces que repitas el zikr no es tan importante. Lo que importa es si lo haces con presencia y conciencia". Baha ad-din Naqshbandi sostuvo que el wuquf- i adadi es la primera etapa de entrada al mundo espiritual. Esta etapa está marcada por la cesación del funcionamiento mental verbal y el comienzo de una percepción directa que no requiere palabras.

11.- Wuquf-i qalbi. Conciencia del corazón.

Este es el mismo que yad dasht. Marca el despertar del Amor Divino. El individuo se vuelve consciente de que su propia existencia es un obstáculo para su transformación final y ya no teme más sacrificarla porque ve por sí mismo que ganará infinitamente más de lo que pierde.

Extractado por Alfredo Marinelli del libro "Los Grandes Maestros de la Sabiduría" de J. G. Bennett, para el Blog "Gurdjieff y Ouspensky - Estudio e Investigación".