La palabra "Trabajo"
define y sintetiza la enseñanza de Gurdjieff. "El Trabajo" es un
término extraído de la Alquimia y significa, en la "Gran Obra", el
refinamiento y purificación de los metales ordinarios en oro, así como la
transformación de la naturaleza humana en naturaleza divina. En forma similar,
las ideas de Gurdjieff, ofrecen una forma práctica de la enseñanza esotérica,
para la transmutación de las sustancias internas del hombre a su máximo
potencial; cuyo ideal es un ser consciente, con comprensión, pero
fundamentalmente libre e independiente, con unidad y voluntad acorde a un
designio superior, es decir armonizando el microcosmos de cada ser humano con
el macrocosmos del Universo, para cumplir satisfactoriamente su función en la
orquestación del mismo. "El Trabajo" es la relación del hombre con
este proceso de transformación, desde la asimilación de las ideas, la
experimentación, a la concreción de sus posibilidades evolutivas en todos sus
niveles y jerarquías.
Alfredo Marinelli
El "Trabajo" tiene que llegar a ser real y viviente para un hombre, tan bien organizado que le permita "recordarse a sí mismo" en la vida cotidiana y obrar desde el "Trabajo" y no desde sí mismo. El hombre debe llegar a tal estado que por más que se lo dé vuelta y se lo retuerza de un lado para otro, por más que se lo trate mal, nunca olvida el "Trabajo, y nunca obra salvo por intermedio del trabajo.
Es posible reducir el espacio existente entre los principios y los hechos, que a tanta gente perturba; aunque por su misma naturaleza probablemente nunca sea eliminado del todo. Pues los principios existen en un mundo superior y los 'hechos' en éste. Si ponemos nuestra atención sólo en los 'hechos' significa que estamos enfocados a este mundo, cuando nos enfocamos en los principios, enfocamos otro mundo; y si pudiéramos conciliarlos, seríamos capaces de crear el puente entre ambos: en eso consiste todo "El Trabajo".
Rodney Collin
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"El Trabajo" es la incognoscible acción por medio de la cual los mundos superiores pueden entrar en nuestras vidas. No se encontrará suficientemente explicado en parte alguna, pues sólo puede ser realizado. Nada más aventurado que enseñar el trabajo: es el trabajo quien enseña, y todos los verdaderos enseñantes son instrumentos suyos.
J. G. Bennett
En un cierto momento uno inevitablemente llega a la conclusión de que este "Trabajo" es el único que vale la pena hacer. Entonces todo lo demás resulta importante sólo en proporción con el grado en el que se prepara para ayudar o apoyar al "Trabajo".
Todavía después uno se da cuenta de que casi todo, en cualquier caso, todo lo normal puede llegar a ser afiliado y relacionado con el "Trabajo" principal. En el cuarto camino, cuanto más se profundiza en el "Trabajo" interno más amplio debe llegar a ser el "Trabajo" externo, y cuanto más se amplía el "Trabajo" externo, más profundo debe llegar a ser el "Trabajo" interno. Es un principio que el desarrollo armónico significa igual desarrollo en todas las dimensiones.
Pero este es un principio a largo plazo y cada etapa tiene su tiempo y cada momento su propia lección y oportunidad especial.
Esto está conectado con la ley de octavas. Estas octavas suenan a través de nuestras vidas y nuestra asociación con "El Trabajo". Y lo que es importante es hacernos sensibles a la nota que está sonando en el momento y responder a ella. Mucho sufrimiento en la vida humana resulta de un intento infructífero por retener una nota que ya ha cesado de sonar, o anticipar una nota que todavía no suena.
"El Trabajo" sobre uno mismo es necesario a fin de formar un puente entre el mundo exterior de los sucesos causales y el mundo de la posibilidad, el mundo libre creativo donde podemos 'morar en Dios'.
"Trabajo", en el sentido en que usamos esta palabra en el sistema, significa el "Trabajo" para la adquisición del conocimiento y para el estudio del cambio del ser. Usted ha de tener algún objetivo claro y trabajar para él, de modo que el "Trabajo" incluye la adquisición del conocimiento y el control de sí a fin de alcanzar su objetivo.
P. D. Ouspensky
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Usamos la palabra “Trabajo” y supongo que poco a poco nos damos cuenta de su grandeza. La utilizamos de diversas maneras, como verbo para decir: “yo trabajo” o “deseo trabajar” o “no sé trabajar” y también la usamos como sustantivo cuando hablamos del “Trabajo”. Cuando la usamos como sustantivo a veces nos referimos simplemente a esta actividad general que esperamos -o confiamos- que nos lleve a la meta que todos buscamos. A veces también la usamos, y con razón, como algo a lo que pertenecemos y en donde tenemos un lugar. Así que desde que la palabra "Trabajo" entró en nuestro vocabulario hemos hablado de estar “en el Trabajo” o “pertenecer al Trabajo”.
Pero también hemos notado a lo largo de los años que, lamentablemente,
es posible tomar esta palabra de estas maneras: de suponer que las personas que
hacen cosas como asistir a estas reuniones o hacer diversos ejercicios son
superiores a los demás debido a eso; y luego hacer una distinción entre las
personas que están “en el Trabajo” y las personas que “no están en el Trabajo”
-¡e incluso hablar de las personas que han “abandonado el Trabajo” con
tristeza!
¿Pero qué significa realmente?…
El "Trabajo" no es solo una idea abstracta, o un proceso, o una actividad,
o algo por el estilo.
El "Trabajo" es mi hogar, mi realidad. Todo lo que es de verdadero valor
lo encuentro a través de él: esposa, hijos, amigos, intereses, estudios, todo.
Todo está “en el Trabajo”… Es la realidad más íntima. Es la realidad de nuestro
yo más íntimo. Cuando nos encontramos a nosotros mismos, lo encontramos.
J.G. Bennett
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Muchas veces la gente se relaciona con el “Trabajo” a
través de imágenes sensoriales exteriores de tal modo que se olvidan a qué se
refiere el “Trabajo”. El “Trabajo” no es un lugar, el “Trabajo” no es una cosa
que se puede tocar o manejar, el “Trabajo” no está en Francia ni en Inglaterra
ni en los Estados Unidos, ni en lugar alguno en el mundo. El “Trabajo” está en
el corazón y en la propia comprensión de ustedes, y dondequiera que un hombre
vaya, el “Trabajo” siempre va con él, si mantiene la justa actitud hacia él.
Sólo los propios esfuerzos de un hombre mantienen el “Trabajo” vivo. Sólo si
está deseoso de recibirlo el “Trabajo” puede tocar a un hombre; y entonces
empieza lentamente a transformarlo. Por lo tanto el “Trabajo” no está en el
espacio ni tampoco en el tiempo. Es algo que no comprendemos, que no es ni
espacio ni tiempo, ni lugar ni momento, para el cual se inventó una palabra
hace mucho tiempo, una palabra que siempre fue mal comprendida, llamada
eternidad.
Maurice Nicoll
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"El Trabajo" sino es realizado en tres líneas será un pseudo trabajo, cuya característica principal es el desarrollo defectuoso de la función emocional. Gurdjieff habló de "Tres Líneas de Trabajo:
1.- El "Trabajo" sobre uno mismo. Estudio de las ideas y la experimentación de todo tipo de actitudes intencionales y ejercicios en pos de la auto-consciencia y la comprensión.
2.- El "Trabajo" con otros y para otros. Compartir observaciones sobre nuestras experiencias, desarrollar tareas más allá de nuestros gustos o no gustos y aprender el arte de la convivencia a través de las prácticas de la consideración externa.
3.- El "Trabajo" para la escuela en sí. La organización y el mantenimiento del trabajo a través de grupos y otras actividades, de modo que el Trabajo permanezca vivo.
Si planteamos estas "Tres Líneas del Trabajo” como objetivos de vida, la "Primera Línea" es el perfeccionamiento individual en su máxima expresión, la "Segunda Línea" es compartir y ayudar a los demás, y la "Tercera Línea" es servir al propósito de la existencia en manera totalmente desinteresada.
Alfredo Marinelli
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El "Trabajo" debe realizarse simultáneamente en tres líneas. La razón principal es que el hombre está dormido y que, cualquiera sea el "Trabajo" que emprenda, pierde rápidamente todo interés por él y lo prosigue mecánicamente. Son necesarias tres líneas, ante todo porque el "Trabajo" en una línea despierta al hombre que se duerme sobre otra línea. Si trabajamos realmente en tres líneas, no podemos jamás dormirnos completamente; en todo caso, no podemos dormir tan tranquilamente como antes; sin cesar seremos despertados y veremos que nuestro "Trabajo" se ha detenido.
P. D. Ouspensky
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Una de las cosas en la que podemos depositar nuestra esperanza es en llegar a confiar en "El Trabajo". Supone muchos años y muchas experiencias, algunas agonísticas y otras maravillosas, antes de que esto pueda tomar posesión de nosotros, y tengamos realmente confianza en que la única cosa en la que debemos confiar absolutamente es el "Trabajo", y en que es posible vivir una vida plenamente satisfactoria mientras nos confiemos a él. Sé perfectamente bien que sin el "Trabajo" no hay nada que pueda hacer. Cometería exactamente los mismos errores, y tendría exactamente las mismas actitudes erróneas que hace veinte, treinta, cuarenta años.
J. G. Bennett
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Todo el "Trabajo" sobre uno mismo depende del recuerdo de uno mismo y sin él no puede realizarse ningún progreso. El recuerdo de uno mismo es un despertar parcial, o el comienzo de un despertar. Naturalmente -y esto debe ser muy claro- ningún trabajo puede realizarse en el sueño.
P. D. Ouspensky
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Nuestro "Trabajo" es mucho más simple de lo que imaginamos. Es el esfuerzo consistente por llegar a ser sincero, honesto y veraz. La honestidad consiste en darse cuenta de que todo se paga, tanto lo que se quiere para sí como lo que se quiere para los demás. Estar al día con nuestros pagos es una gran felicidad y libertad. Ser veraz consiste en juzgar imparcialmente a todas las personas y todas las cosas, incluyendo uno mismo, de acuerdo con las leyes que nos han sido dadas y no con preferencias o conveniencias. Ser sincero es aprender a ser uno mismo, siguiendo un camino propio y sin imitar a nadie, ni siquiera a quienes más admiramos. Todo el tiempo estamos siendo observados y ayudados dentro del campo de influencia en que nos encontramos. Y seremos usados en proporción al logro de estas tres cualidades.
Rodney Collin
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El hombre total es el "hombre de la resurrección", el hombre que ha devenido hecho a imagen de Dios. Conforme trabajamos en esta vida, la imagen de Dios se hace real en nosotros. Meister Eckhart dijo del hombre divino, "Todo lo que Cristo tiene por naturaleza, él lo tiene por gracia". Participa en el Acto Divino por el cual el Dios-Verbo desciende al mundo para hacer posible nuestra transformación, de modo que podamos retomar a la Fuente. Habiéndose abandonado a sí mismo, trabaja ahora desde "El Trabajo" mismo. Esto se encuentra más allá de nuestra comprensión tal como somos; pero ante nosotros está la posibilidad del "Trabajo" aquí y ahora sobre nosotros mismos. Esto lo podemos saborear, verificar y practicar.
En realidad no hay gente especial; y en el "Trabajo" sobre nosotros mismos todos somos mendigos por igual, igualmente principiantes, todos debemos empezar desde el punto en que nos encontramos aquí y ahora. La decisión a la que nos enfrentamos es suficientemente simple: vivir como animales y morir como perros, o "Trabajar" sobre nosotros para volvernos hombres. Entonces podemos empezar a vivir a partir de una comprensión práctica de lo que somos y de lo que podemos devenir. Pero para que esto suceda hemos de dedicarnos, aquí y ahora, al "Trabajo": esta es la puerta angosta y el camino estrecho, y, para llegar a la vida, no hay otra."
Existe una falsa esperanza donde se cree que en el futuro seremos mejores. El nivel de ser no tiene nada que ver con el tiempo lineal. Un nivel de ser más alto se encuentra inmediatamente por encima de todos nosotros en este mismo instante, no está en el futuro del tiempo sino en nosotros mismo, en este preciso momento "AHORA".
Todo el "Trabajo" sobre sí, se ocupa de cierta transformación del instante o del presente a través del trabajo mismo. Maurice Nicoll
Compilado por Alfredo Marinelli para el blog: "Gurdjieff y Ouspensky Estudio e Investigación"
Básicamente el trabajo consiste en hacer pasivo al ego. Es el que cierra la puerta,es la clave.Al no haber ego vemos que la puerta está abierta. Y eso significa que ya hemos despertado. Un proceso que nos lleva toda una existencia poder realizar. No es fácil ni difícil es interesante. Fuera del juego el ego se nos abren todas las posibilidades para la Recreación de sí en consciencia de ser.
ResponderEliminarGracias por comentar, efectivamente una de las facetas del proceso de transformación, es que a través del trabajo se desarrolle nuestro ser esencial, para lo cual el rol activo de la personalidad, estructurada por el ego, debe cumplir un rol pasivo. Para que esto sea una realidad, en los grupos de “Trabajo”, se estudian las distintas energías que sustentan al ego (energía mecánica, sensible, consciente, creativa), ya que cada una de estas energías le da características específicas de manifestación, y las técnicas a utilizar son bien distintas. Como bien comentas es un proceso que se inicia, que puede llevar toda una existencia, pero no sabemos si tiene fin.
EliminarExcelentes y profundas reflexiones,son como ventanas, a nosotros corresponde mirar por ellas más allá todavía..
ResponderEliminarHermosa alegoría.
ResponderEliminar¡Que cada día tengamos ventanas, para a través de ellas, ampliar nuestra capacidad perceptiva de la realidad!
Muchas gracias por compartir.